Hace años mamá y yo decidimos ir a visitar a mi tía Julie que vive en Miami. Yo adelanté mis exámenes en la universidad y mamá dejó todo listo en casa, con órdenes para todos, y enrumbamos directo para allá para celebrar otro Thanksgiving en el país del norte.

Estuvimos un par de semanas en Miami paseando, comprando y recorriendo todos los Centros Comerciales en busca de los miles de encargos que teníamos. Sin embargo, hicimos un alto a nuestras actividades turísticas durante todo el día de Día de Acción de Gracias para ayudar a mi tía a preparar la cena.

Esta vez yo ya estaba lo suficientemente adulta como para ayudar un poco en la cocina y me encantó hacerlo, porque aprendí algunas técnicas y recetas que ahora aplico en la cena navideña que organizo en casa con toda mi familia, incluyendo a mi mamá (quien aplaude cada uno de mis platos, dicho sea de paso).

Una de las recetas más ricas que aprendí de la tía Julie fue el puré de camote con marshmallows al horno. Este platillo es una de las sensaciones de la cena, porque todos saben que lo voy a preparar una vez al año y lo disfrutan tanto que me pidan que lo vuelva a hacer el año entrante justo después de saborearlo.

Es increíble cómo, con unos cuantos ingredientes muy sencillos y económicos, podemos crear un festín de sabores en la mesa de navidad. Este puré lo sirvo como acompañamiento junto al pavo con frutas o al lechón ahumado, porque ese saborcito dulce que aporta el aderezo de frutas secas del lechón junto con el puré es delicioso. Pruébenlo y verán que no se arrepentirán.

Imágenes: eHow.