Un rincón elegante lleno de claroscuros, perfecto para una cita romántica, un after office o para pasar un buen rato con amigos, sea cual fuere el pretexto,Valentino es una excelente opción. Este restaurante desde hace 25 años trae al Perú lo mejor de los sabores mediterráneos y un atractivo bar en donde la especialidad de la casa son los martinis.

El local es definitivamente increíble: elegante pero sutil. Ahí podremos degustar platos tan exquisitos como la mousse de foie, gras a la pimienta verde o los corazones calientes de queso parmesano con camarones en salsa de vino tinto.

Pero es a partir de las 6 de la tarde en que la barra, y al estilo inglés invita al comensal a degustar su selecta carta de vinos, y especialmente sus martinis. Un saxofonista pone los acordes suaves y deliciosos del jazz y de la música contemporánea que hace el lugar perfecto para una reunión de a dos, o algo más íntimo. Es de resaltar también, otra especialidad del bar: el cóctel capitán, el cual recomendamos probar.

Giannattasio, el dueño y gestor de este hermoso lugar, estuvo dedicado al mundo de la hotelería, era director de restaurantes en una cadena de hoteles, por lo que viajó por todo el mundo. Luego de conocer a una peruana, vino a nuestro país del cual se enamoró, y fundó su local, el cual, no tiene señales ni letreros, pero que está en el listado de los restaurantes de culto en nuestro país.

Una novedad en su carta es que cambia cada tres meses. De acuerdo a Giannattasio, esto para sorprender agradablemente a los asiduos comensales, tanto como a los nuevos. Puede acompañar su coctel o vino con algunos de los selectos platos mencionados anteriormente y disfrutar de una agradable velada en el que la atención de primera está garantizada.

Imagen: Blogs.chron.