Whisky, una bebida sofisticada y encantadora
Si hablamos de elegancia y sofisticación, de una noche al calor del fuego y una agradable compañía, sin duda la bebida infaltable es el whisky, ese licor hecho de granos de cereal molidos (cebada, maíz o centeno) y añejados en barriles de roble, cuya fuerza y textura sorprenden gratamente al paladar, tras el primer sorbo.
Hay diferentes tipos de whiskys, dependiendo de su graduación alcohólica (va desde los 35 a 50 grados) y al tipo de ingredientes empleados para su producción (el tipo de cereal que puede ser malteado o sin maltear, mezclado, etc., y de agua empleada). Uno de los whiskys considerados insuperables y top entre los de su tipo es el scotch whisky (o escocés) su producción es de tal tradición y renombre, que existe una Orden de Whisky Escoces quien dictamina las normas de su preparación.
El whisky, como los licores fuertes, suele tomarse solo. Puede en todo caso, emplearse como aperitivo, o bebida para una sobremesa. En Lima hay una buena oferta de licores en restaurantes cuyas barras son las estrellas, tal es el caso del restaurante Picas, que queda justo debajo del Puente de los Suspiros, un lugar ideal para tomarse unas copas con la tranquilidad de la noche y la complicidad de una buena compañía. Puedes tomarlo «en las rocas» (con hielo), aunque los más puristas recomiendan probarlo solo para disfrutar al máximo de su aroma y sabor; o si prefieres suavizarlo un poco, con agua mineral.
Y como toda bebida espirituosa y con cuerpo, hay que beberla de a pocos para no perdernos de sus encantos. Si piensas ofrecerlo en una reunión o velada, tienes muchas buenas marcas para elegir, por ejemplo el Swing, o el Johnny Walker. También el Ballantine’s, Jack Daniels y el Chivas Regal. Todos ellos ofrecen una interesante gama de este licor, de acuerdo a tus preferencias que puedes encontrar en Vivanda.
Imagen: Leon Kennedy.