El clima limeño parece que no se define, mientras que nosotros ya no sabemos si abrigarnos o quitarnos las chaquetas. Me pasa que, por las tardes y en la oficina, comienzo a sentir frío y lo único que quiero es tomar algo calientito. También por las noches, cuando termino de trabajar.

Una muy buena opción es tomarse un poco de café, pero no solo, sino acompañado de otros ingredientes que pueden tornar más amena esa pequeña taza. Obviamente, no podemos amenizar nuestro café en la oficina, pero los fines de semana, en alguna reunión casera con amigas, podemos incluir un extra a nuestro café.

¿A qué me refiero? Pues a preparar una variante de nuestro delicioso café. ¿Cómo hacerlo? Es muy sencillo, tan solo tienes que tener un poco de imaginación en esto y recordar que la fusión es básica en nuestra gastronomía y en nuestra carta personal de bebidas hechas en casa.

Una de las recetas que más me gusta es el Café Chateau, porque puedo agregarle un poco de ese licor de cerezas que me fascina y decorar mi tacita con crema chantilly y un marrasquino. Cada vez que viene Claudia a casa terminamos preparando este delicioso café, acompañándolo con unas lengüitas de gato.

Otra receta por la que pueden optar los amantes de esta bebida es el Bailey’s Café. Este tipo de licor combina muy bien con el café y es ideal para tomarlo a cualquier hora del día bien calientito. El café, la leche y el Bailey’s se funden y crean un sabor espectacular. A mí me gusta decorar con bastoncitos de chocolate por encima y unos biscuits de menta.

No solo puedes acompañarlo con las galletas que te he mencionado, también puedes incluir muffins o croissants en tu lonche. Si prefieres algo dulce, te recomiendo los croissants rellenos de fudge que encuentras en Vivanda; son deliciosos y a tus invitados les van a encantar.

Imágenes: RD.