Sabores fuertes, atrevidos y seductores. Así podríamos describir en pocas palabras las cualidades y bondades de la cocina alemana, de la que nos ocuparemos en este artículo para conocer algo más acerca de lo que nos puede ofrecer.

La gastronomía alemana proviene de una mixtura de tradiciones, tanto regionales como la de los países vecinos (Suiza, Austria, República Checa y Francia). Esto da como resultado platillos verdaderamente deliciosos, tanto con ingredientes como la carne, como con mariscos y pescados. También son famosos sus postres, como su famosa torta selva negra o sus galletitas Bethmännchen (de mazapán y con forma de personitas).

Aunque en todo el mundo la referencia a la cocina alemana haga pensar tan solo en los embutidos y salchichas, adentrarse en sus detalles y conocer sus posibilidades nos hará descubrir que es mucho más que eso.

Uno de sus platos más famosos en todo el país es el codillo de cerdo o Eisbein. Este lleva el nombre de un corte de la carne de cerdo, pero también de un delicioso pernil de cerdo ahumado y cocido al horno que se acompaña de un puré de papas (en la zona de Berlín) y el no menos popular chucrut o sauerkraut (ensalada de col agria). Esta ensalada se prepara fermentando la col en salmuera (en el sur y en Austria).

Como dijimos anteriormente, y al igual que la cerveza, cada región de Alemania tiene su propia gastronomía. Por ejemplo, en el norte del país es famoso el arenque encurtido que se suele acompañar con pan de centeno. Otro platillo que más bien se consume como aperitivo, y también hecho a base de arenque, es el Rollmop, arenques encurtidos en vinagre, y enrollados alrededor de pepinillos y ensartados con un palillo de madera para que no pierdan forma.

En el centro de Alemania encontramos el Köthener Schusterpfanne (Sajonia) (carne de cerdo asada con papas y peras); el Handkäse o «queso de mano», que se sirve como aperitivo en la region de Hesse; y como no podíamos dejar de mencionar a las famosas salchichas, nombraremos a la Thüringer Rostbratwurst, salchicha elaborada en Turingia a base de carne picada de vaca o cerdo.

En el sur es famosa la Flammkuchen, que también es consumida en Alsacia (Francia) y que es una masa de pan a la que se le añaden otros ingredientes como panceta, tocino y cebollas. Es muy similar a la pizza. Asimismo, del sur de Alemania es de donde proviene la famosa torta selva negra o Schwarzwälder Kirschtorte.

No podíamos finalizar este post sin mencionar las bondades de la panadería alemana, que tiene muchas variedades de pan elaborados con distintos ingredientes y que les dan diferentes nombres: weißbrot, o pan blanco, sonnenblumenkernbrot o pan de semillas de girasol, pan de centeno o roggenbrot. Mención especial para el Stollen, un pan elaborado con harina, pasas y frutas confitadas, una delicia que se come en Navidad.

Imagen: Hoy invito yo.