Historia de la butifarra, puro sabor
Uno de los sándwichs más famosos de nuestro país es la butifarra. Sus orígenes se remontan al arribo de los italianos al Callao, quienes importaron la costumbre de ahumar y conservar los embutidos. Además, fueron los españoles quienes trajeron el cerdo a nuestras tierras y el consumo del «jamón del país» se remonta también a aquellas épocas.
La elaboración de la butifarra hoy en día contempla la salsa criolla hecha a base de cebolla roja, ají con limón y sal, acompañada de una verde y crujiente hoja de lechuga. Algunas variantes incluyen también rodajas de tomate y todos los ingredientes reposan en un crocante pan ciabatta o francés y juntos son una delicia típica de carretilla que tampoco pueden faltar en distinguidos restaurantes de la capital.
Si bien podemos encontrarla fácilmente en las esquinas o el mismo parque Kennedy en el corazón de Miraflores, existen muchos locales en donde podemos disfrutar esta delicia. Por ejemplo en La Antojería o en El Peruanito, podemos pasar un agradable momento con nuestros amigos o familiares degustando la butifarra con un café, infusión o un jugo.
Una butifarra es la opción ideal para una merienda o para luego del trabajo con los amigos y en realidad para toda ocasión, pues nunca está de más disfrutar de su delicioso sabor.
Imagen: Facebook de la Antojería