El brandy es un delicioso licor obtenido a partir de la destilación del vino. Desde su invención hace muchos siglos, se ha consolidado como el licor ideal para una agradable conversación en pareja o con los amigos. De entre los tipos de brandy que existen, el cognac destaca como el de mejor aroma y sabor, ideal para una velada en un restaurante o en la casa a al luz de las velas.

A este licor, por sus características (su sabor delicioso y fuerte, así como su fragancia) no se le suele maridar con alguna comida. Es, más bien, perfecto para una sobremesa. En Francia por ejemplo es común beberse una copa de este fino brandy, luego de una comida; sin embargo, algunos expertos amantes del cognac sugieren que en realidad esta bebida combina con todo.

Sea como fuere, el cognac se encuentra entre los licores más exclusivos y seductores. Las marcas de cognac más conocidas son Hennesy, Lautrec y Courvoisier, este último, se dice, fue el favorito de Napoleón. En innumerables películas, anuncios publicitarios y todo lo relacionado a pasar un buen momento, aparece el cognac como la bebida por excelencia.

Los expertos recomiendan que para disfrutar de un agradable momento con el cognac, no solo bastan comprar una buena botella y probarla. Es necesario crear el ambiente propicio y tener la compañía propicia. Por ejemplo, se sugiere que el cognac combina perfectamente con el aroma y sabor de un buen cigarro. También es importante utilizar la copa adecuada. Las que tienen forma de tulipán (con la base ancha y la boca estrecha) son ideales pues, descansan perfectamente en la mano, y permiten agitar levemente el licor para sentir su fragancia y textura.

Y por último, el cognac no es definitivamente para una reunión ruidosa con mucha gente. Este licor se presta para momentos más íntimos.

Imagen: Esquire.