Uno de los primeros licores que probé en mi vida fue la cerveza, cuando aún era una adolescente y comenzaban las primeras fiestas de la secundaria.

Obviamente, las mamás de las cumpleañeras estaban presentes para evitar cualquier desmán, pero, de todas maneras, nos las arreglábamos para probar uno o dos vasos de la dorada bebida que tanto llamaba nuestra atención.

Es ahora que soy adulta que comprendo mejor el hecho de tomarse una cerveza. A mí me gusta y no voy a negarlo. Claro, también me encanta tomarme unas Margaritas o un delicioso Pisco Sour, pero lo bueno de la cerveza es que puedes tomarla en cualquier momento del fin de semana sin tener que agitar la coctelera.

Conversando con Frank, un amigo británico que estuvo de visita por Lima hace algunas semanas, llegamos a la conclusión de que la cerveza no es cualquier licor y menos esa bebida que la asociamos mucho a las fiestas de los jóvenes en las playas.

Muy por el contrario, la cerveza es una bebida alcohólica que tiene una gran historia en la vida de la humanidad. Se dice que los primeros vestigios se han encontrado en producción de cerveza se han descubierto en Europa y datan de hace más de 4000 años.

Asimismo, Frank me cuenta que en Inglaterra está muy arraigada la costumbre de beber cerveza todo el tiempo y esto se da en las familias de todas las clases sociales. Así, me da fe de su sorpresa por las escasas variedades con las que contamos nosotros, los peruanos, frente a todas las que ellos tienen.

Entre las del estilo británico (en cuanto a su proceso y componentes) figuran alrededor de unos diez estilos. También vemos las que contienen estilo belga; estos dos tienen una fermentación baja (Lager) a diferencia del estilo alemán con una fermentación alta (Ale).

Encontramos que, tengan el estilo que tengan, la cerveza siempre va a tener, como componente principal, un cereal que pasará a ser fermentado. Por ello es que se dice que la cerveza apareció en el mundo junto con el descubrimiento del pan. ¡Qué tales descubrimientos!

Imágenes: BeerAndHotDogs.