Un agradable reencuentro con Vodka Tonic

vodka-tonic

Recibí una inesperada invitación en mi correo electrónico el miércoles pasado. Una amiga a quien no veía ni sabía nada, estaba convocando a una reunión de reencuentro «para todos quienes terminamos la secundaria juntos y para los que se cambiaron de colegio también».

Ese correo me trajo tantos recuerdos de mi época colegial, recuerdos tan gratos de la adolescencia, mi fiesta de graduación, el viaje increíble que hicimos. Claro que iría a esa reunión, pero antes, contacté a Fernanda, la amiga que me escribió la invitación. Ella fue la primera mejor amiga que tuve en mi vida. Cuántos juegos e ilusiones compartimos juntas en esos años… ¿y qué sería de ella ahora?

Le propuse salir el sábado a tomarnos una copa, una conversación previa antes del gran reencuentro y charlar todo lo que en casi 20 años no hicimos. Ella aceptó encantadísima. Le pregunté a mi esposo dónde podríamos ir y me recomendó un restaurante bar en San Isidro. Me encantó cuando entré, tenía un impresionante y bien iluminado bar, donde el bartender, cada cierto tiempo, hacía proezas acrobáticas con las botellas y cocteleras. Me hacía recordar tanto un bar al que solía ir en la temporada en que viví en Barcelona. Sí, sin duda era el lugar ideal. Además el amoblado era espectacular: mullidos sillones y sofás con sus mesas de centro invitaban a pasar una agradable velada.

Al reencontrarnos nos dimos un abrazo interminable… ¡cuántos años! ¡y qué bien se veía! Comenzamos a charlar y charlar horas recordando tantas cosas que habíamos pasado juntas. Nuestras parejas nos miraban absortos y es que no parábamos de reír. Así que para el primer brindis de esa noche, pedimos unos vodka tonics.

Este trago se ve súper sencillo de hacer, pero en las manos del bartender, es simplemente un espectáculo. Un poco de jugo de limón, de agua tónica, los cubitos de hielo de rigor y el vodka, todo en la medida exacta y para finalizar, una rodaja de limón en el borde del vaso. Sin duda que con este agradable coctel, nuestra reunión fue espectacular e inolvidable.

Imagen: Bazaar