A muchas mujeres que pasan por esta maravillosa etapa de la vida, les ocurre muchos cambios emocionales y corporales. Uno de ellos es la piel, la que sufre algunos cambios durante este periodo.

Esto ocurre, pues durante el embarazo se suceden muchos cambios hormonales para preparar las condiciones adecuadas en las que se desarrollará el futuro bebé. Así, aparecen síntomas como manchas, estrías, acné, pecas y en algunos casos, el cambio de pigmentación de la piel.

Casi todos estos cambios cutáneos desaparecen durante el parto.

Aquí te damos algunos datos sobre estos cambios:

• Estrías: se producen debido al estiramiento de la piel producto de la gravidez; generalmente aparecen en zonas como el vientre, los senos, caderas y piernas. Son de color rosáceo u oscuro. Aunque existen productos que ofrecen desaparecerlas, lo cierto es que a veces esto no sucede.
• Acné: les aparece a muchas, y son las acumulaciones de grasa y materia sebácea. Hay que lavarse periódicamente la zona y mantenerla limpia. El acné desaparece con el parto.
• Línea negra en el abdomen: aparece por la pigmentación de la piel durante el embarazo y va desde el ombligo hasta la zona pélvica. También desaparece durante el parto.
• Cloasma (o «máscara del embarazo»): consiste en el oscurecimiento de ciertas zonas de la piel, especialmente las del rostro (sienes, nariz, la base de los ojos y la frente) que pueden oscurecerse aún más al exponerse al sol. Desaparecen con el parto.
• Escozor: a raíz de que la piel se estira para adaptarse al crecimiento del feto, se produce comezón, especialmente en las zonas del vientre y los senos. Usa cremas humectantes para reducir el efecto.
• Palmas enrojecidas: se producen por el aumento de estrógeno en el organismo; tanto en las manos como en los pies se produce enrojecimiento y escozor. Se van durante el parto, pero se pueden atenuar con cremas humectantes.