El fin de semana fui a visitar a una amiga muy cercana que acaba de venir de viaje. Estuvo dándose unas merecidas vacaciones por Miami junto a su esposo. Habíamos quedado en vernos hace un par de semanas y ya era tiempo de pasar por su casa.

«No sabes, mujer, ¡qué rico sol!», me contaba, poco a poco, todo lo que había vivido allá en un mes de estadía y todo lo que había vuelto a visitar; Cris y yo habíamos viajado juntas hacía ya algunos años y, según me contaba, las cosas estaban un tanto cambiadas.

Después de un rato de conversar en la terraza me dijo que la acompañe a su dormitorio, porque tenía algunas cosas que enseñarme. Grande fue mi sorpresa cuando vi dos maletas repletas de ropa de verano, perfectas para la siguiente temporada que se avecina.

«¿Cómo has podido traer tanta ropa?». Me contó que tuvo que comprar otra maleta en Miami para poder traer toda la cantidad de prendas que quería. «Me aloqué, quise traer regalos para todo el mundo. Escoge lo que quieras». De pronto mis ojos se posaron en un traje un tanto particular.

Lo tomé y me di con la sorpresa de que era un jumper, muy parecido a algunos que yo tenía cuando era chica. «¡Qué lindo, Cris! ¡Un jumper!». Terminó regalándomelo, me quedaba perfecto. «Todo el mundo los usa allá, están súper de moda, no tienes ni idea».

Y pues sí, resulta que los jumpers son toda una sensación, sean en la tela que sea, sean en la forma que sea. Estuve averiguando un poco sobre el tema y me di cuenta de que es una tendencia que llega desde las más grandes pasarelas del mundo de la moda.

El modelo que me regaló es en color negro, largo y con tiras sobre los hombros; es un jumper súper sencillo, pero que me brinda un look muy moderno y estoy segura de que en Lima será todo un boom en este verano 2010.

Imágenes: FashionDirectory.