La soya: gran alternativa para intolerantes a la lactosa
Conozco muchas personas y no todas son iguales. Cada una tiene sus propias maneras de ser, sus propios gustos y sus propias aficiones. Asimismo, cada una cuenta con diversas alergias o intolerancias, si de alimentación se trata.
Los organismos no son siempre los mismos y no todos asimilan de la misma manera todos los alimentos. Una de estas intolerancias es la que se tiene de la lactosa, que se da en personas con deficiencia de la enzima lactasa.
Descubrir si tenemos intolerancia a la lactosa es muy sencillo: los síntomas que se presentan luego de consumir productos lácteos son las náuseas, las diarreas, el dolor estomacal y la sensación de pesadez acompañada de flatulencias.
No todo está perdido si no toleras los lácteos, al contrario. En el mercado de hoy en día podemos encontrar miles de productos derivados de la soya que cuentan con muchas vitaminas y valores nutricionales que no tienen nada que envidiarle a los quesos o a los yogures.
Los productos de soya los puedes encontrar en muchas presentaciones. Por ejemplo, la leche de soya ya es muy común en miles de tiendas y supermercados. El yogurt de soya es delicioso, mientras que el tofu -o queso de soya- lo podemos comer frío o caliente.
Por su parte, la soya contiene gran cantidad de proteínas, necesarias para el correcto funcionamiento del organismo. Asimismo, es capaz de brindarnos mucha energía en momentos en los que nuestro nivel de estrés es intenso.
También es capaz de ayudarnos a regular nuestros niveles de colesterol malo en la sangre, lo que lo convierte en un alimento ideal para cualquier tipo de persona y para su consumo en cualquier momento del día y de nuestra vida.
Imágenes: PRLog.