Hidratarse es imprescindible en verano, pues debido al intenso calor, se consumen los líquidos del cuerpo en la sudoración y además se pierde energía. Peor aún si somos personas muy activas o que estamos en constante movimiento debido a la rutina del día.

Además de los líquidos, que son súper necesarios para que el organismo trabaje bien, también se pierden las sales minerales, elementos que el organismo requiere complementariamente para funcionar correctamente. Algunos de estos microminerales son el calcio, el zinc y el magnesio.

Beber mucho líquido será entonces nuestra prioridad para cobrarnos las pérdidas ocasionadas por el calor. En el mercado existe un sinnúmero de alternativas y en este artículo pasaremos revista por algunas.

• Bebidas rehidratantes

Las bebidas rehidratantes son una muy buena alternativa para recuperar los líquidos y las sales minerales. Elaboradas pensando especialmente en los deportistas, son compuestos líquidos que contienen carbohidratos, los cuales nos proporcionarán glucosa, y en consecuencia, energía, y también electrolitos o sales minerales.

Adicionalmente, también pueden contener suplementos vitamínicos. Estas bebidas pueden ser hipotónicas (menos electrolitos que fluidos intestinales), isotónicas (igual cantidad de electrolitos por fluidos) e hipertónicas (más electrolitos que fluidos). Las dos primeras son básicamente rehidratantes, mientras que la última es energizante.

• Té helado

Aunque es mucho más popular consumirlo caliente, la versión que lleva algunos cubitos de hielo y mucha frescura es igualmente refrescante, hidratante y nutritiva. Además de contener vitaminas del grupo B (B1, B2), el té contiene ácido fólico y minerales, como magnesio y potasio.

El té es diurético, por lo que nos hará mantener la línea y estar hidratados. Para prepararlo hacemos la infusión de la manera regular, dejamos que enfríe y le añadimos hielo. Esta es la manera más natural de prepararlo, pero en los supermercados también podemos encontrar té helado ya preparado.

• Agua

La recomendación de beber agua va para todo el año, pero en verano es especialmente indicada. No solo para saciar la sed, sino para mantenernos hidratados correctamente. Aun cuando tomemos alguna otra bebida hidratante, tenemos que beber agua. Como mínimo debemos tomar 2 litros de agua a diario y  nunca justo antes o después de comer, sino entre las comidas.

• Jugos y extractos de frutas

Las frutas contienen muchas vitaminas y sales minerales esenciales para una correcta absorción de los líquidos. Es sabido que benefician enormemente al organismo reconstituyendo células y tejidos, manteniéndonos jóvenes y saludables. Consume jugos diariamente.

• Agua mineral

Contiene calcio, magnesio, hierro y sodio, minerales esenciales para la síntesis de muchas proteínas. El agua mineral aporta muchos otros beneficios, como el de regular la digestión, facilitar la absorción de vitaminas, disintoxicar el organismo, etc.

Imagen: Todo belleza.